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jueves, 23 de diciembre de 2010

dejemos de lado el orgullo

No lo hagas más difícil, dejemos de lado nuestro orgullo. Y es que quiero decirte que lo siento. Tú no sabes lo adorable que eres… Tengo que decirte que te necesito, y que he sido yo la que ha hecho que te alejaras de mí. Pero nadie dijo que sería fácil. Nadie dijo que fuera a ser tan duro. Es una lástima para nosotros el estar así. Puede que estemos mal pero esto no va a acabar aquí. Porque estoy aquí para ti, por si te interesa saberlo. Tocaste mi corazón, me llegaste al alma, cambiaste mi vida y todas mis metas. Me di cuenta de que el amor es ciego cuando, me cegaste el corazón. Y es que te conozco bien. He besado tus labios, he sostenido tu cabeza, he compartido tus sueños, he compartido tu cama; y también reconozco tu olor. Te vi llorar, te vi sonreír, te observé mientras dormías durante algún tiempo. Conozco tus miedos y tú conoces los míos. Y ya se que tenemos nuestras dudas, pero mañana estaremos bien, te lo prometo. Te quiero, te juro que eso es verdad, no puedo vivir sin ti. Fuiste el único para mí. Y sufrirá mi alma si llega el momento del adiós. Me gustaría pasar el resto de mi tiempo contigo. Por eso te pido, por favor que volvamos al principio… Porque acabo de recordar que nada llega a hablar tan fuerte como mi corazón. Así que dime que me amas, regresa. Volvamos a ser; tal y como éramos antes.

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